Alitas de pollo al vino blanco
Si lo que se busca es cocinar un rico plato, fácil y económico, esta es la receta ideal: alitas de pollo al vino blanco. Se elaboran en muy poco tiempo y con ingredientes muy sencillos de conseguir. Lo que hay que cuidar es que las alitas estén limpias de plumas, para no llevarse sorpresas ingratas a la hora de servir. Esta receta hará las delicias de grandes y pequeños en casa.
Es ideal tener preparado un buen caldo de pollo. Entre otras cosas, para facilitar que los sabores se afirmen y el plato no resulte seco, sino que conserve su jugo. Resulta un plato consistente y tan sabroso que nadie en la familia podrá dejar de comerlo. Se puede acompañar de un arroz blanco que combina a la perfección.
Ingredientes:
Cómo preparar alitas de pollo al vino blanco:
- En primer lugar, limpiar bien las alitas, quitando los restos de plumas que eventualmente pudiera tener. Cortar por las articulaciones quitando las puntas. Salpimentarlas ligeramente y reservar.
- A continuación, pelar los ajos y cortarlos en finas láminas. Pelar y cortar la cebolla en trozos pequeños.
- En una sartén, echar un chorrito de aceite de oliva y añadir las alitas y freírlas unos minutos, dándolas vuelta para que se doren por todos lados. Luego incorporar los ajos. Una vez que estén ligeramente dorados, retirar y reservar sobre papel absorbente.
- En la mima sartén añadir la cebolla cortada y dejar que se dore. Agregar las alitas previamente cocidas e incorporar el vino blanco. Una vez que el alcohol se haya evaporado, añadir el caldo de pollo, el laurel y el orégano. Remover y dejar a fuego suave durante 15 minutos, hasta que la salsa reduzca y se vuelva más consistente.
- Rectificar de sal y pimienta si fuera necesario y retirar del fuego.
- Servir bien caliente y espolvorear perejil fresco picado encima de cada plato. Se recomienda acompañar con arroz blanco, queda completo, nutritivo y sabroso.
¿Te has tentado con estas alitas de pollo al vino blanco? Resulta un plato realmente rico y muy fácil de hacer. Las alitas de pollo son muy sabrosas y el toque del vino en la cocción le otorga una textura jugosa muy particular. No dejes de preparar esta receta, pruébala porque te sorprenderá.